Caso Clara Quintana: «Es una familia que demuestra transparencia y honestidad» dijo Miranda. En entrevista con diario La Prensa, el concejal Alberto Miranda se refirió al caso Clara Quintana, considerando que hay que rescatar el acto de cariño reciproco que hay entre la auxiliar de servicio y los alumnos de esta escuela; apelo al criterio humano de sensibilidad y sentido común de quien tomó la decisión para que pueda rever esta resolución y permitir que por lo menos la funcionaria se mantenga en la escuela hasta fin de año. Es lo menos que se merece» sentenció Miranda.
«En la noche del jueves estaba viajando a la capital departamental cunado recibo una llamada de la vecina, Clara Quintana, planteándome que quería mantener una entrevista con este concejal para explicarme la situación laboral por la cual estaba atravesando. La noté muy angustiada y lógicamente lo primero que le solicite es que se tranquilizara que en el plano de la vida absolutamente todo tiene una respuesta y una salida» comenzaba diciendo Miranda.
«Quedamos de encontrarnos a la hora 10:00 del viernes en la sala mayor de sesiones del concejo y me comunica que no va a ir sola, sino acompañada de integrantes de la Comisión Fomento, del Consejo de Participación, padres, vecinos y docentes de la Escuela 52, quienes le brinda su total apoyo en esta instancia.»
«Me explica de forma muy resumida el problema y cuando lleguè a casa lo primero que hice fue llamar al alcalde para manifestarle que iba a tener esa reunión y llamar también a los demás concejales. Al alcalde le pareció bien y me hizo algunas sugerencias válidas que las incorporamos a la reunión, entre ellas, que no podemos salirnos lógicamente de los carriles estatutarios de los organismos públicos algo que coincidimos totalmente y que así debe ser en todos los organismos del Estado» comentó Miranda.
Como habíamos acordado la noche anterior, el viernes se llevó a cabo la reunión, previa convocatoria de todos los concejales, en la cual con el único que no pudimos contactarnos fue con Graña, porque lo que realmente es muy necesario en este tipo de casos es que el cuerpo acompañe en su totalidad articulando con quien corresponda y en buenos términos buscando la mejor salida a la situación» sostuvo Miranda.
«Si bien nosotros no tenemos competencia ninguna en los organismos de la Educación Pública, sí somos responsables como tercer nivel de gobierno de los problemas que afectan a la ciudadanía como lo establece la Ley 16.972 donde dice que el municipio debe articular con las organizaciones competentes que la ciudadanía estipule. Por eso esa Ley en una parte dice Ley de Descentralización y Participación Ciudadana. Lo que quiero decir con esto es que si bien no tenemos injerencia, tenemos el deber como representantes electos democraticamente por el pueblo, de articular cuando así se nos pida. Y así lo hicimos saber en la reunión» subrayó MIranda.
«Como no pudimos contactarnos con uno de los concejales, se fijará para la semana entrante una reunión del cuerpo para elaborar una carta intención donde le brindamos todo el apoyo a la funcionaria sin desconocer los carriles estatutarios que tienen estos organismos. Sabemos que es el CEIP quien en definitiva toma las resoluciones y quien acepta o descarta las inquietudes que se pueden plantear»
¿Mas allá de lo jurídico y reglamentario, en lo personal, cual es su opinión sobre esta situación que se plantea?
«Hay acciones y reacciones dentro de los pueblos que no se deben perder. Este acto de cariño reciproco entre la auxiliar de servicio Clara Quintana y los alumnos de esta escuela es uno de ellos, por eso apelo al criterio humano de sensibilidad y sentido común de quien tomó la decisión que pueda rever esta resolución y permitir que por lo menos la funcionaria termine este año en la Escuela 52. Es lo menos que se merece» reflexionó Miranda.
Consecuencia de la tercerización del comedor de la Escuela de La Capuera
«Además, cabe agregar -dijo Miranda – sin querer salirme de los carriles estatutarios, que esta situación se da no porque ellos lo hayan solicitado, sino porque Emiliano, el hijo de la funcionaria, al tercerizarse el comedor de la Escuela 108 de La Capuera, la inspectora Marisa Lequerica, hoy jubilada, y necesitando un cocinero en la Escuela 52, designa a Emiliano, Ledesma hijo de Quintana, para ocupar ese cargo. Todo esto surge de la reunión mantenida el viernes, advirtió Miranda.
«Es de destacar, comentó el concejal, que madre e hijo jamás ocultan su lazo sanguíneo haciéndolo saber a cada una de las nuevas autoridades que se presentan en la escuela. Esto demuestra transparencia y honestidad de parte de esta familia» subrayó.
«Por eso mas me convenzo que dado como se dio todo esta situación cabría la posibilidad que la nueva inspectora reviera su postura y mantenga en su cargo a esta muy querida persona y eficiente funcionaria» sugirió Miranda.
¿Considera que sus compañeros concejales acompañarán su postura?
«No tengo dudas que el concejo en su conjunto estará articulando para llegar a buen puerto con este tema. Si bien aún no nos hemos reunido, es lo que me han expresado los concejales vía telefónica y lo que hemos hablado con Mendez en la reunión»
«Insisto en que nosotros no tenemos injerencia en el tema y eso cuenta con un marco legal que no desconocemos, pero si apelamos a todo lo anteriormente expuesto, teniendo en cuenta que no existe ningún tipo de cuestionamientos al trabajo que desempeña la familia en la escuela, si no todo lo contrario, se escuchan únicamente elogios.
Tampoco cuestionaremos la decisión final que adopte el organismo, único competente en este tema y lo que decida será definitorio» sentenció el concejal.











